Cuando Novalis (seudónimo de Federico Leopoldo von Hardenberg) comenzó a escribir este diario tenía 25 años y hacía 31 días que Sofía von Kuhn, su novia había muerto a la edad de 15. El estilo del Diario Íntimo es simple, candoroso e ingenuo, y lleva en sí la fuerza de resolución interior del autor, quien se propuso seguir a la novia en la muerte, en la morada la más pura loada por Novalis en sus HIMNOS A LA NOCHE. Según lo que se sabe, la novia de Novalis no pasaba de ser una niña de “inocencia riente”: “Como se encuentran todos los pensionados”, dice Maeterlinck. O sea, no era nada del otro mundo. Para Novalis, fue la mujer tantas veces idealizada por los románticos, que toma un cariz de pureza cuando desaparece. El Diario, como se verá, no alcanza más que unos meses de la vida del autor. Luego hay una interrupción y nos damos cuenta de que el poeta no fue del todo fiel a la “resolución” de la imagen de Sofía y vuelve a enamorarse esta vez de Julia von Charpentier. Después, no escribe más que seis fechas en su diario y diez meses más tarde muere a la edad de 28 años. en esta versión al castellano hemos procurado ser fieles al ritmo y a la sutileza de las líneas de este documento humano.
18 de abril de 1797. Tenstedt.
Tercer día de Pascuas.
(3 días después de la muerte de Sofia)
Esta mañana, algunas tendencias sexuales. Pensamientos de toda suerte sobre Ella (1) y sobre mí. Filosofía. He estado relativamente alegre, ligero. Mi resolución (2) ha estado firme. Sentimiento de debilidad, pero también de extensión y de progresión. Moritz (3).
En la mesa y después del almuerzo he estado locuaz y alegre. Justo nos ha cantado esta canción: “Canta, oh Lied, al son de la cítara”.
He descubierto en “Wilhem Meister” un pasaje que me conviene: es, en el cuarto libro, uno monólogo de Meister. En seguida subí a mi cuarto y trabajé en mis Memorias. No sentía inclinación hacia el trabajo ni hacia la meditación. Me parece que al mediodía, de una manera general, me sentí bien dispuesto para el trabajo. Tal vez sea lo que me rodea lo que me molesta. Cuando me entrego a la sociedad me encuentro incómodo.
19 de abril.
Esta mañana temprano muchas cosas pasaron dentro de mí: he dudado, mi resolución vacilaba. Más tarde, filosofía. A mediodía me sentí alegre. A las dos subí a mi cuarto. Filosofía. Recorrí de nuevo mis antiguas observaciones, después me paseé. Por la tarde respondí viejas cartas. Una carta de Carolina(5), la cual me ha emocionado… y una poesía de Landvoigt.
Visité las damas de Gruningen(6) y mostré a la mujer del juez el retrato de Sofía. Hablamos mucho de Ella. En general, he estado calmo y alegre.
20 de abril.
Hoy pensé mucho en Sofía. Durante la mañana no estaba bien dispuesto. Pero hacia mediodía todo se fue mejorando. A mediodía estuve muy contento, pero con una sensibilidad más rica que de costumbre. Sin embargo he trabajado con amor en mis Memorias. En la tarde releí antiguas cartas escritas por mí a Just. Tarde la noche, aun cuando no me sintiera bien, me encontraba un poco jovial. En conjunto hoy concebí buenos pensamientos. Esta mañana escribí al Capitán(7) y felicité a la pequeña Carolina(8) en Gruningen por su aniversario….

















