Se han arrastrado hasta el asco recorriendo el mundo para que destruyan a Venezuela. Quisieron coronarse dueños del país en el 2016. Se pusieron en cuatro patas ante Obama, ante Trump y Luis Almagro. Se han hartado de celebrar la quema de negros en Venezuela. Son íntimos amigos de los miserables de Álvaro Uribe Vélez y Juan Manuel Santos, y ahora corre putas muy mimadas a besarle el trasero al godo Mariano Rajoy. Es lo que les queda después de haberse llevado un buen palo cochinero el 30 de julio. Y ahora es cuando van a llevar palo del bueno.
Están a reventar y dicen que van a tratar la crisis que padece Venezuela, y la apertura de un canal humanitario.
Muy putitas ellas, expondrán delicadamente la situación política venezolana, en la que se conformó una asamblea nacional constituyente de manera ilegal y se han irrespetado las competencias del Parlamento electo en diciembre de 2015.
«España está con la democracia, la libertad y el progreso del pueblo venezolano», indicó Rajoy en su cuenta de Twitter.
Ayer, Guevara y Borges sostuvieron un encuentro con Emmanuel Macron, presidente de Francia. De acuerdo con el presidente de la Asamblea, Macron expresó su apoyo total al Parlamento venezolano.

















