Yo soy de Cazorla: Se fue el caballo viejo
Aldemaro Barrios Romero
Don José Acevedo (tío del poeta Ángel Eduardo Acevedo), arpista de vocación y trabajador campesino por dedicación fue el autor de la música del famoso pasaje Caballo Viejo, me informó el poeta de Tucupido, Salvador Lara, que el día lunes 22 de abril de 2024 se nos fue Don José para siempre con 105 años a cuestas, nos dejó su música infinitamente.
Lo conocí en su casa en San Juan de los Morros en 2011, por “culpa” de Omar Vielma y Salvador Lara y me compartió confidencias interpretativas de sus pasajes y golpes: Pájaro Amarillo, Mocho Hernández, Flor del topochal, El Cazorleño y Caballo Viejo entre otras de sus creaciones musicales.
Tenía la paciencia de un siglo y la erudición de un sabio, pero más discreto y humilde no podía ser, era grande de alma y de estatura, su enorme tamaño de árbol mayor y sus manos como las arañas que evocó Gallegos en su novelística para describir como el llanero traspunteaba las cuerdas del arpa, eran distintivos de una personalidad artística, ingenua, pero pedagógica.
Hace algunos años me propuse resolver la incógnita del verdadero origen de esa hermosa letra de “Caballo Viejo” y tomé nota de varias referencias, opiniones y testimonios al respecto, entre otras la amistad entre Simón Díaz y el poeta Ángel Eduardo Acevedo, quien afirmó tajantemente que esa letra era de su amigo Simón. Se ha dicho que la letra era del poeta, pero su tío Don José Acevedo (arpista y creador de la música de Caballo Viejo) me confesó en una entrevista en 2014, que Angel Eduardo la anotó de la voz de un llanero que la cantó en una de esas parrandas en las que se aventuraban con frecuencia entre Guayabal y Cazorla (Sur de Guárico) y que “Eduardito” se la dio a Simón.
El año 1982, Simón Díaz gestionó, organizó y produjo un disco titulado “De Garcita a la Culebra” como arpista Don José Acevedo y de cantante Ángel Eduardo Acevedo que interpretó “Caballo Viejo” al mejor y auténtico modo campesino con tono original llanero como se canta un pasaje en el llano guariqueño.
Simón apoyó y produjo un tesoro musical que gracias a Dios quedó grabado, solo que poco difundido pero luego él lo grabó con su voz y le dio “paternidad” a ese pasaje, con el mismo modo campesino llanero de Angel Eduardo, y así lo catapultó a un escenario de audiencias múltiples nacionales e internacionales.
Don José Acevedo, recuerda que Simón les pagó su trabajo musical y luego lo contrató para que cuidara su finca en San Sebastián de los Reyes al sur del estado Aragua en las puertas del llano venezolano donde nació la tonada La Vaca Mariposa, que fue una vaca madre de verdad que enfermó con mal de rabia estando su cría pequeña, entre otras tonadas que gracias al trabajo de Simón Díaz han sido difundidas, conocidas y reconocidas por el pueblo venezolano y más allá de las fronteras de Venezuela.
Él quería que se escribiera un libro sobre sus vivencias para guardar su memoria y así comenzamos a grabar varios episodios de sus relatos, al momento cuando tenía sobre 90 años, el Gabinete de Cultura de Guárico le hizo un homenaje en la Plaza Bolívar de San Juan de los Morros, donde acompañé a Lisbeth Torres Olmos, entonces presidenta de la Casa del Artista, fue un sencillo pero muy sentido homenaje al creador musical de Caballo Viejo, y él muy orondo y con su voz antigua, agradeció a ese pueblo de Cazorla por haber nacido allí, por eso con orgullo decía: Yo soy de Cazorla.