Guillermo Guzmán
Pongo al sol mi ignorancia en cuestión de anagramar pero mi cerebro no es un simple recipiente, yo no puedo prescindir de mi derecho a pensar y a criticar, eso sí, en sentido constructivo.
Se ha vuelto apremiante la cuestión de nuestra política exterior. La insurgencia de los BRICS ha alterado el avispero, lo que se perfila como una tendencia gradual para el esquema mundial, para Venezuela se presenta como un desafío ineludible; pueda que para otros los fenómenos internacionales se aparezcan como inentendibles pero para nosotros, para el pueblo venezolano, eso tiene que esclarecerse.
Alborotar el caso BRICS luce como una deliberada apuesta gringa para intentar tapar la hoy matanza de niños y de mujeres embarazadas en Palestina llevada por ellos, los gringos, Israel y la Unión Europea y de por sí la ExxonMobil dándole cuerda a arrastrados como Lula y Amorín, estelarmente.
Insisto e insistiré en señalar que el tema de la política exterior de Venezuela está en aumento, por no decir que en ebullición, por una parte, porque con el proceso de recuperación de nuestro Territorio Esequibo le hemos pisado los callos a muchos empantuflados Lulas; la expansión de nuestras relaciones internacionales con exxon de los BRICS demanda del Presidente Maduro mucha butría y talento pero independientemente de una que otra crítica que en particular yo pudiese hacerle al Presidente Maduro entiendo que él posee suficientes capacidades demostradas e inclusive potenciales que implican un alto nivel de desempeño en tareas cognitivas que requieren soluciones creativas, respuestas magníficas; ejemplo sencillo las demostradas ante “casquillo de oro” y “casquillo de diamante” durante el pasado “Con Maduro +zodando”, dos periodistas de alta factura, excelentes, Luis Guillermo Guzmán de Telesur y Pérez Pirela de la Iguana (ah, y eso que faltó Barri Castellano de VTV).
Maduro demuestra tener la astucia de un gato, no es poca cosa tampoco hacer sin decir, o acaso decir sin decir como hacen las hormigas.
Eh, hablo de logros que pueden ser demostrados con ejemplos simples pero la mar significativos.
Bueno, los recurrentes problemas fronterizos en la historia política venezolana y que se han agravado por la voraz rapacidad imperial han sido tratados por Maduro con gran tino y eso es auspicioso. Maduro demuestra tener una agenda y un orden de prioridad para evitar a toda costa que aquí corra mierda con sangre y es que estamos en la hora crucial bolivariana, por lo que no podemos ni debemos abandonar ningún escenario de batalla, cada quien a lo que tiene que hacer y sin lloriqueos.
La posesión del recurso petrolero y gasífero tan valorado en esta hora crucial de definiciones complejas requiere de una política internacional muy bien hilvanada por parte de Venezuela contemporánea al frente de la cual está Maduro con en sus manos la agenda de Chávez y por eso yo cierro filas con el chavismo bolivariano de Maduro.
Lula se metió en su closet y se valió de un tal Amorín para tratar de hacernos una guayaqueta —exxon mediante— en contra de los BRICS pero Maduro, que si es anagramista (aparte de taxidermista), con su desempeño en la Cumbre BRICS en Kazán (Rusia) les metió a Lula y al Lulísmo miedo’ pa dentro y miedo para bambolear.
Ñapa:
Lula, ¡toma tu tomate y ve a lavate ese paltó!
Ñapita:
Amorín, ¡coge jabón pa’que lava jato!
PD:
Lo de inalambricidad es propiedad intelectual de Diosmazo (dando).- cuestión que no niego ni afirmo sino lo contrario.