Tinoco Revenga, Pedro (hijo): Véase Banco Latino.
Tinoco Revenga, Pedro (hijo): “Genio banquero” de adecos y copeyanos, enredado con todas las mafias que lavan dinero negro en el mundo. Trabajó a servicio de los negocios de CAP y del Grupo Cisneros. Lo llamaban el “Tanquecito”. Defendió los “intereses de las empresas multinacionales, especialmente petroleras, en sus conflictos contra la Nación[1]”.
Tinoco Revenga, Pedro (hijo): “Cisneros y su viejo camarada Pedro Tinoco, hijo, hicieron desde Caracas cuanto estuvo de su parte para impulsar el boom financiero venezolano en Florida. Cuando Robert Graham, gobernador de ese estado y ferviente partidario del esquema de “banca libre”, llegó a Caracas en octubre de 1980 para estimular las inversiones venezolanas en Florida, Gustavo Cisneros y Pedro Tinoco, hijo, fueron quienes le organizaron el gran agasajo a él y a sus patrocinadores. Pero la conexión también se extiende, por supuesto, al ámbito financiero. Por 1978 los Cisneros adquirieron propiedad minoritaria del Florida First National Bank de Jacksonville, la principal integrante de una compañía tenedora de alcance estatal llamada Florida National Bank of Florida. Puso a Tinoco en la junta directiva del banco para representar allí el interés de los Cisneros”[2].
Tinoco Revenga, Pedro (hijo): “El abogado Pedro Tinoco, hijo, representante venezolano del Banque Sudameris, el banco de los intereses financieros jesuitas y de las compañías aseguradoras venecianas, es socio de Cisneros en diversos negocios. Informalmente, a Tinoco se le conoce también como “el hombre del Chase” en Caracas, así como el contacto principal de la familia Rothschild. Gracias a su posición como primer ejecutivo del Banco Latino de Venezuela, ocupa una destacada posición en el llamado “Grupo Occidente”, el más poderoso grupo empresarial en la frontera colombo-venezolana, uno de los sitios más concentrados del mundo en lo que a cultivo de drogas se refiere”[3].
Tinoco Revenga, Pedro (hijo): “Los banqueros de Caracas pintan a Tinoco como “el banquero más listo de la ciudad... joven, agudo y siempre en acción”. También pudiera ser uno de los más sucios. Sus vínculos con la familia Cisneros Rendiles son tales que se los considera como un solo grupo. Por ejemplo, en 1981, Gustavo Cisneros lo nombró presidente de la junta directiva de la cadena de supermercados CADA.
Cuando el Banco Latino decidió crear una nueva sede central en 1980, Tinoco obtuvo el préstamo del Banque Sudameris, de la Banca della Svizzera Italiana, de American Express International Banking Corporation y de Araven Finance, Ltd. (asociación de la Kuwait International Investment Company, Morgan Grenfell el Banco Consolidado de Venezuela, y el Banco Latino, del mismo Tinoco)”[4].
Tinoco Revenga, Pedro (hijo): “Tal como se ha documentado en este libro, éste es el grupo que maneja grandes cantidades de dinero ilegal. Las oficinas de Sudameris, American Express y las más venerables compañías aseguradoras venecianas son omnipresentes en toda Iberoamérica. Ellas controlan el negocio de seguros y reaseguros y otros grandes negocios relacionados. De 1981 a 1983, Iberoamérica perdió más de mil millones de dólares en “fuga de capitales”, la mayor parte ilegales, y continúa perdiendo fondos en este momento, los cuales se dirigen hacia el sistema financiero de ultramar. Cuentas falsas, falsas pólizas de seguros, subsidiarias falsas que emplean falsos consultores y fletan barcos y aviones falsos, van a cuentas bancarias de ultramar, y después de ahí a condominios e Miami o adonde sea. Existe una economía fantasma cuyo propósito es extraer fondos de Iberoamérica, y la sostienen compañías mil millonarias como la Generali. Como ya anotamos, el mismo grupo Cisneros tiene mil millones de dólares fuera de Venezuela.
“Gustavo Cisneros Rendiles, Oswaldo Cisneros Fajardo, Pedro Tinoco y sus amigos mantienen un pie en esta economía fantasma. Ellos trabajan a un nivel bastante superior al de los meros políticos del país, a quienes se digna dar apoyo económico de vez en cuando para obtener un favor aquí y allá. Continuamente se codean - quizás con un ligero estremecimiento - con los Hernández Cartaya y la World Finance Corporation. Como ya se dijo, el Hong Kong and Shangai Bank no mantiene bolsas de heroína en sus bóvedas, ni acostumbra prestarle dinero a los mercaderes de del interior de Tailandia que cosechan la amapola; lo que hace es funcionar como banco central y emisor de moneda para los cientos de bancos chinos de ultramar que sí lo hacen. El Citibank no maneja directamente a sabiendas la fuga de capitales; sus funcionarios del “personal bancario internacional” mantienen una pequeña lista de ex colegas que lo hacen por ellos, para que el Citibank pueda ser el recipiente final de estos depósitos. El Hong Shang describe esto como “libre empresa”, y los ideólogos de la Sociedad Mont Pelerin se encargan de elaborar las justificaciones filosóficas del caso.
“Lo importante no es tanto que se atrape a Oswaldo Cisneros con las manos en la masa, aunque eso no deja de ser divertido; más que eso, la Organización Diego Cisneros, el Grupo Latino, y el resto de los de su calaña colaboran con los banqueros de la orden jesuita y los bancos de liquidación de los viejos fondos europeos para ordenar los asuntos de las naciones y sus sistemas financieros, en tal forma que un Hernández Cartaya estará a su disposición a cualquier hora que le truenen los dedos. En el remolino del bajo mundo financiero, ladrones y hampones como Cartaya compiten entre sí por las gracias de los olímpicos, quienes escogen a sus sirvientes de entre los sobrevivientes”[5].
Tinoco Smith, Pedro: padre de Pedro Tinoco; este señor fue en toda la dimensión de la palabra un verdadero hijo de puta con sus hijos y con su primera mujer la señora Narcisa Jiménez a la que se sacó cuando ésta tenía apenas doce años. Hay allí una historia muy escabrosa, porque siendo el viejo Tinoco Smith un hombre todopoderoso al servicio del abominable Juan Vicente Gómez, se llevó a la muchacha incluso amenazando a los padres de ésta. En vida del viejo Tinoco Smith la señora madre de dos muchachos que tuvo con el viejo Tinoco nunca llegó a ver a sus hijos. Un día que Pedro hijo le preguntó a su papá por su mamá, el viejo le cortó en seco y le respondió más o menos en estos términos: “ella era una bailarina francesa que estuvo por aquí de paso y yo le pagué diez mil bolívares por cada uno de ustedes, y listo, ya no está en Venezuela. Se fue.”
Tinoco Smith, Pedro: Cuando Vicentico Gómez (el hijo del tirano) murió, quien le llevaba las cuentas era Pedro Tinoco Smith, de modo que éste conocía casi toda su vida privada, y es muy probable que en esa relación como administrador de los bienes de Vicentico ya le estuviera montando cachos al hijo de Gómez. Pues bien, la mujer de Vicentico (Josefina Revenga, la mujer más bella de Caracas) se enamoró de Pedro Tinoco Smith, y una vez muerto el joven en Suiza, Tinoco Smith se presentó ante Juan Vicente Gómez y le pidió permiso para casarse con la viuda. Dicen que Gómez cuando supo de los amores y que profirió: “la viuda de mi hijo no es querida de nadie. Que se casen.”
Pero nada de eso, el dictador Gómez era un hombre muy práctico, aceptó la solicitud siempre y cuando en el lecho le sacara a Josefina todos los secretos de Vicentico (relacionados con la conspiración para tumbar el gobierno, igualmente los relacionados con la muerte de Juancho). Esto para Tinoco Smith era cosa de muy poca monta, aceptó gustoso lo que se le solicitaba y en compensación Gómez lo hizo inmensamente rico. Lo puso nada más y nada menos que a trabajar con las compañías petroleras, a ser el abogado alcahuete, miserable y vendido a los negocios que aquí quisiesen hacer los gringos con nuestro petróleo. Tinoco Smith era apoderado de la Lago Petroleum, filial de la Estándar Oil (empresa de los Rockefeller), y también Iron Mining.
Josefina Revenga venía siendo hija de José Rafael Revenga, médico del Presidente Cipriano Castro, el que le recomendó tratara su enfermedad en Europa, quizá con la idea de que lo destronaran. Con Josefina, Pedro Tinoco Smith convivió sólo diez años y tuvo con la ex mujer de Vicentico dos hijos.
Tirado, Armando J.: Abogado miembro del Grupo 400+ (G-400+). Véase Grupo 400+ (G-400+).
Tontos: Los tontos dicen tonterías, los listos las hacen. Los sabios inventan refranes, los tontos los repiten.
[1] “Los peces gordos”, de Américo Martín, 5ª edición, Vadell Hermanos, Valencia, 1975, pág. 107.
[2] Tomado de “NARCOTRÁFICO S.A.” “LA NUEVA GUERRA DEL OPIO”, VARIOS AUTORES ADSCRITOS AL GRUPO: EXECUTIVE INTELLIGENCE REVIEW THE BENJAMÍN FRANKLIN HOUSE NEW YORK, 1985. La familia Cisneros: los Bronfman de Venezuela”.
[3] Ut supra.
[4] Ut supra.
[5] Ut supra.