Zago, Ángela: el 7 de abril de 2002 al diario El Universal: “Otro gobierno es la única opción”.
Zago, Ángela: De ella tiene escribió Argenis Rodríguez en su diario (del día 18 de julio de 1972): “He leído 75 páginas del libro de Ángela Zago “Aquí no ha pasado nada”. Es un libro escrito por una pendeja, una mujer prejuiciada y tonta. No hay nada de buena intuición. Es, cuando más, una de esas cosas que llaman testimonio, ¿pero qué no llaman testimonio hoy en día? Habla de que el caudillismo es malo, desconociendo que en política todo es caudillismo y que en los partidos Comunistas es donde más abundan los caudillos: Lenín, Tito, Fidel Castro, el Che, etc., todos son o han sido caudillos. Habla de eso de amar la humanidad. ¿Y quién no dice amar la humanidad? Habla de todos esos lugares comunes de que la tierra es para el que la trabaja o para el campesino, cuando esto es un infantilismo. Ve un prado y dice que se parece un jardín burgués. ¿Es que sólo los jardines burgueses son lindos y bien cuidados? ¡Qué tonterías! Un jardín se cuida en cualquier sistema. Para Ángela Zago los campesinos son unos niños. Ingenuos, llanos, simples. Dicen exactamente lo que piensa. ¡Qué tonta! Cómo se aprecia que desconoce el alma humana, y tal vez un campesino es más complicado que una persona como ella”.
Zago, Ángela: Autora de “La Rebelión de los Ángeles”, un elogioso libro sobre la rebelión del 4 de febrero. Dama que siguiendo órdenes de Gustavo Cisneros, pretendía hacer inclinar a Chávez hacia la derecha. Para eso le pagaban. Cuando Chávez no le hizo caso, entonces declaró: “Hemos escogido como líder a un fracasado, el fracasado del 4 de febrero, el único que no dio la cara, el único que se acobardó el 4 de febrero, el único que como militar hizo lo último que hace un militar digno, que es permitir salir por televisión para decirle a sus compañeros “!Ríndanse!” por cierto, siendo un perjuro, porque 24 horas antes el señor había jurado con el resto de sus compañeros que pasara lo que pasara no se iban a rendir.”
Zago, Ángela: De esta mujer, Chávez dijo: “Nosotros nos conocimos en prisión. Ella escribió un libro, más nunca nos vimos. Cuando ganó Caldera, Napoleón fue al canal 8 y Ángela se convirtió en promotora y defensora de ese gobierno. Al igual que Arias. Por eso la relación entre ellos se fue consolidando”.
Zago, Ángela: Dijo el 7 de abril de 2002:“Otro gobierno es la única opción. La institución Militar debe respaldar a la Sociedad Civil para que se dé un cambio”. Ex guerrillera. Esposa de un ser nebuloso, de horrible risa artificial que sólo existía entre luces y cámaras; de los más serviles al imperio de Gustavo Cisneros: Napoleón Bravo. Esta dama expresó que prefería que los marines hollasen el suelo patrio a que Chávez continuara en el gobierno. Dijo igualmente: “El Presidente planificó la masacre del 11-A… Yo fui agredida por un Presidente que planificó esa matanza. Lo digo con propiedad. Esto fue fríamente calculado por Chávez[1]”.
Zambrano, Edgar: Diputado adeco a la Asamblea Nacional. Protagonizó un escándalo en un restaurante del estado Vargas, cuando fue sorprendido en cordial reunión con la rectora Sobeya Mejías, cuando apenas ésta estaba asumiendo su cargo. Su trabajo al servicio de la gran desestabilización del gobierno de Chávez le ha reportado un gran apoyo económico por parte del Departamento de Estado norteamericano.
[1] Semanario La Razón, 22 de agosto de 2002.