La Policía colombiana está disparando, además de fusiles y metralletas, bombas de fragmentación recalzadas con tornillos, tuercas, clavos y diferentes elementos punzantes destinados a mutilar o asesinar a los manifestantes, destinados a generar el mayor daño posible. Esto es parte del Terrorismo de Estado en Colombia. Esta represión homicida es silenciada por “organismos internacionales” y grandes medios, dado que el Estado colombiano es un Estado que facilita el mayor saqueo capitalista de Colombia a las transnacionales, y lo viene haciendo desde hace décadas, precisamente mediante el Exterminio.
l manifestante Eloy Alejandro Mata Díaz, asesinado por la policía colombiana y su accionar parapolicial, en el que policías de civil y miembros de los ejércitos privados de la clase dominante, actúan coordinadamente con policías uniformados para asesinar manifestantes. La Estrategia paramilitar y parapolicial forma parte del Terrorismo de Estado.
Que el mundo sepa y vea cómo el Estado colombiano está asesinando al pueblo para intentar sofocar la protesta social. Los grandes medios y los “organismos internacionales” callan en total complicidad, porque el Estado colombiano posibilita el mayor saqueo capitalista de Colombia a transnacionales y burguesía local, y lo hace precisamente mediante el Exterminio.
Las imágenes son dolorosas, pero deben ser mostradas, porque el silencio y la censura amparan el Exterminio.
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Esta es la realidad de Terror de Estado en Colombia que los grandes medios silencian. Algunos de los manifestantes detenidos-desaparecidos por la policía colombiana, están apareciendo asesinados con signos de tortura: desmembrados, flotando en los ríos, en fosas clandestinas, lanzados a las vías, sus cabezas cortadas en bolsas, etc. Las fuerzas represivas del Estado colombiano (policiales, parapoliciales, militares y paramilitares) han secuestrado y desaparecido a cientos de personas en el marco del accionar estatal homicida contra la protesta social (represión desatada con particular saña desde el inicio del Gran Paro del pueblo colombiano, que está a punto de cumplir dos meses).
Urge solidaridad internacionalista. La dictadura con máscara de “democracia” (mediante unas supuestas “elecciones” en las que la burguesía compra votos con su poder económico) está masacrando al pueblo colombiano, desatando un Terrorismo de Estado solamente comparable al de las peores dictaduras asumidas como tal.
Ayude, por favor, a difundir lo que los grandes medios silencian porque el Estado colombiano es amigo preferente del imperialismo estadounidense y europeo y viabiliza, precisamente mediante el Exterminio, el mayor saqueo capitalista de los inmensos recursos de Colombia. S.O.S.
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Murales del Gran Paro Nacional, Colombia, 2021. El arte con consciencia ha desplegado toda su creatividad y esfuerzo durante estas semanas de Paro, por todas las ciudades y campos de Colombia. Aquí un mural en homenaje al Estudiante combativo, y también un mural por los 6402 asesinatos perpetrados por el ejército colombiano contra niños y jóvenes civiles campesinos o de los barrios obreros de las ciudades, que fueron secuestrados o llevados bajo promesas laborales al lugar en el que fueron asesinados para luego disfrazar sus cadáveres y presentarlos bajo la perversa modalidad de los “falsos positivos”, crímenes de Estado. Los miembros del ejército recibían primas por cadáver presentado. Estos crímenes siguen en la impunidad dado que los altos responsables de esta barbarie no han sido juzgados. Los crímenes de Estado en Colombia siguen siendo un flagelo, como se ha podido constatar durante este Paro.RELATED ITEMS← Previous StoryUruguay. Paro general: Con los puños llenos de verdades (fotos)Next Story →Colombia. Tres asesinados en una nueva masacre en Antioquia…
Que el mundo sepa y vea cómo el Estado colombiano está asesinando al pueblo para intentar sofocar la protesta social. Los grandes medios y los “organismos internacionales” callan en total complicidad, porque el Estado colombiano posibilita el mayor saqueo capitalista de Colombia a transnacionales y burguesía local, y lo hace precisamente mediante el Exterminio.
Esta es la realidad de Terror de Estado en Colombia que los grandes medios silencian. Algunos de los manifestantes detenidos-desaparecidos por la policía colombiana, están apareciendo asesinados con signos de tortura: desmembrados, flotando en los ríos, en fosas clandestinas, lanzados a las vías, sus cabezas cortadas en bolsas, etc. Las fuerzas represivas del Estado colombiano (policiales, parapoliciales, militares y paramilitares) han secuestrado y desaparecido a cientos de personas en el marco del accionar estatal homicida contra la protesta social (represión desatada con particular saña desde el inicio del Gran Paro del pueblo colombiano, que está a punto de cumplir dos meses).
Urge solidaridad internacionalista. La dictadura con máscara de “democracia” (mediante unas supuestas “elecciones” en las que la burguesía compra votos con su poder económico) está masacrando al pueblo colombiano, desatando un Terrorismo de Estado solamente comparable al de las peores dictaduras asumidas como tal.
Ayude, por favor, a difundir lo que los grandes medios silencian porque el Estado colombiano es amigo preferente del imperialismo estadounidense y europeo y viabiliza, precisamente mediante el Exterminio, el mayor saqueo capitalista de los inmensos recursos de Colombia. S.O.S
Murales del Gran Paro Nacional, Colombia, 2021. El arte con consciencia ha desplegado toda su creatividad y esfuerzo durante estas semanas de Paro, por todas las ciudades y campos de Colombia. Aquí un mural en homenaje al Estudiante combativo, y también un mural por los 6402 asesinatos perpetrados por el ejército colombiano contra niños y jóvenes civiles campesinos o de los barrios obreros de las ciudades, que fueron secuestrados o llevados bajo promesas laborales al lugar en el que fueron asesinados para luego disfrazar sus cadáveres y presentarlos bajo la perversa modalidad de los “falsos positivos”, crímenes de Estado. Los miembros del ejército recibían primas por cadáver presentado. Estos crímenes siguen en la impunidad dado que los altos responsables de esta barbarie no han sido juzgados. Los crímenes de Estado en Colombia siguen siendo un flagelo, como se ha podido constatar durante este Paro.