Ganar las elecciones Presidenciales en Venezuela del 20 de mayo de 2018 con un 68%, en medio
de una abstención del 52%, es un Acto Heroico para el Chavismo y para su líder, el PRESIDENTE,
REELECTO, Nicolás Maduro Moros. Tanto es así, que es el mejor registro histórico con que
Presidente alguno le ha ganado a sus adversarios en Venezuela; por lo demás, el nivel de
abstención, con todo y que aumentó un 22% por encima de su media histórica, sigue siendo uno
de los mejores de la región (América del Sur hasta el Norte) y de la Eurozona.
¿Por qué es heroica?
Porque nuestro país está siendo objeto de una Guerra de IV Generación desatada por el
Imperialismo Norteamericano, conjuntamente con sus lacayos de la Región (Grupo de
Lima), los de Europa y los internos (descarrilados en la MUD). Esta Guerra ha sido infernal
en su componente Económico. Destaca en ella: 1) El envilecimiento de los precios del
petróleo, con la explotación del petróleo de esquisto con el método de fracking, por parte
de Estados Unidos (política que con mucha sabiduría ha venido combatiendo nuestro
Presidente y su alto mando). 2) El Cerco Financiero (al presente nos tienen secuestrados
más de 2000 millones de dólares destinados a compras ya concertadas), cuestión que
hacen, arbitrariamente y a su merced, por ser recursos que circulan por el Sistema
Financiero Mundial, el cual está bajo su dominio. 3) La manipulación de la Moneda (del
Bolívar) con el dólar paralelo (que a diario publican en la página web, TODAY). 4) El
contrabando de extracción (Gasolina, bienes y también, el dinero en efectivo).
Con todos estos mecanismos (y otros), pero fundamentalmente con el tercero; nos han
sometido a una expoliación descomunal; al punto de que, producto de la estructura
económica dependiente que aún arrastramos de la 4ª República, el 72% de lo que
importamos en seis rubros fundamentales (No solo alimentos, sino también:
Medicamentos, Autos y repuestos, Maquinarias y equipos, Materiales metálicos
manufacturados, Plásticos y cauchos), lo hacen representantes del Imperio asentadas en
Venezuela, como Corporaciones (verbigracia, ALIMENTOS POLAR en el rubro ALIMENTOS).
El Estado Venezolano, apenas estaría importando el 28%. De allí que, al hacerse efectiva la
manipulación de nuestra moneda con el DÓLAR TODAY, a este nivel macro, nos
encontramos con qué: a.- Al 72% de nuestras importaciones (10.800 millones de dólares
del total de 15.000 millones que registran éstas), le ganarían (tomando como referencia
febrero 2018 donde el TODAY lo “cantaron a 250.000 bsf”), 2.500.000% (EN EL CASO DEL
80% DE ESAS IMPORTACIONES QUE FUERON GARANTIZADAS CON EL DÓLAR DIPRO, 10
BSF); lo cual representa en una año: una ganancia de 216 BILLONES DE DÓLARES
(216.000.000.000.000). b.- El Estado, a su 28% (4.200 millones de $), rigiéndose por el
porcentaje de ganancia oficial para las Importaciones (40%), le estaría ganando solo 1.680
millones de $. O sea que entrampados en una estructura económica absurda, por decir lo
menos, al aplicarnos la manipulación de la moneda, como mecanismo de su Guerra
Económica, resultamos participando en una escena infernal, dantesca donde la ganancia
anual del Estado Venezolano vs. La de las CORPORACIONES IMPERIALES es la siguiente:
1.680.000.000 vs 216.000.000.000.000. ES DECIR, MENOS DEL UNO %, prácticamente es
del cero % la ganancia del Estado en relación con la del propio IMPERIO. ¡ HE ALLÍ, PUES,
LA PRESENCIA DEL IMPERIO EN NUESTRA ECONOMÍA HOY, CON SU MANIPULACIÓN DE LA
MONEDA! Esa descomunal ganancia sale de las costillas de nuestro pueblo y, también, de
los ingresos del ESTADO, de sus reservas, de endeudamientos y de otros lares. Es esa
extracción de calidad de vida, la que se manifiesta minimización creciente de: la ingesta
alimentaria de todo un pueblo, la ingesta de medicamento y del surtimiento de los
insumos para cubrir otras necesidades vitales: aseo personal, transporte, calidad de
tenencia y uso de vivienda, autos, … y de miles de servicios con los que llevamos nuestra
vida.
En medio de este tremedal económico, se dio nuestra confrontación electoral.
Una situación así, como la que estamos viviendo todos los Venezolanos dirigida a
enloquecer a las personas, a impedir su razonamiento normal; posibilita la tentación a
apartarse de la política, a olvidarse de ella, a quitarle toda importancia a elecciones;
máxime, sí toda esta Guerra económica es acompañada de una Guerra Psicológica y
Comunicacional, donde empleando técnicas y metodologías exitosas en varios países del
mundo, se imponen mentiras sobre el enemigo de los pueblos y de la explicación de los
procesos que utilizan para doblegarlos, dominarlos y saquearlos.
El Enemigo, llamó a la abstención por intermedio de la dirigencia de los partidos
mayoritarios de ella, y acompañó este llamado con el de la INTERVENCIÓN al país. Y, con
un pueblo sometido al tremedal económico descrito; fracasó, el pueblo no se puso
violento ni incendiario, se mantuvo a la expectativa; no los siguió, se quedaron solos, en el
extranjero, moviendo países lacayos, lamiéndole los pies al Presidente de Estados Unidos y
a los de los países de Europa. Esto no pasó de allí; pese a las amenazas, a los Decretos de
Trump, al movimiento de sus tropas en las decenas de Bases Militares que tienen
cercando a nuestro país, desde países aledaños al nuestro.
Otra parte del enemigo, llamó a la participación; en un ambiente, donde el llamado a la
abstención del Imperio y de la Oposición que compartió su táctica intervencionista, era
lógico que le afectara. Jugar al incremento de la abstención, culpabilizando a Maduro de la
situación económica que vive el país y mantener una opción electoral (a manera de
“cayuco”); esperando una altísima abstención, acompañada de una “apurada” victoria de
Maduro que lo ilegitimara, quizás fue la carta que en conjunto jugaron Oposición local e
Imperio en lo electoral, para luego darle continuidad a su Carta Principal que sigue siendo
la intervención (para lo cual no implica que la tengan todas consigo).
Ocurrió, entonces, que pese al tremedal económico descrito, LA ABSTENCIÓN NO FUE LA
ESPERADA POR ELLOS y los resultados electorales, tampoco: El más cercano de los
Opositores (Henri Falcón), fue TRIPLICADO; y con ello, NICOLÁS MADURO MOROS, pasa
a ser el Presidente de la República que en la historia de Venezuela ha resultado ganador
con el mayor porcentaje de votos en relación con su adversario.
¿Por qué pudo ser mejor?
El Presidente Nicolás Maduro Moros, supo: ubicar con su pueblo al enemigo principal; activar la
participación protagónica y directa del pueblo; activar magistralmente la agitación, movilización y
organización de su pueblo (utilización de medios y redes, actos, visitas casa x casa, asambleas
populares, organización del partido -carnetización de 6.500.000 personas-, organización de
SOMOS VENEZUELA -inscripción de 1.000.000-, organización de Chamba Juvenil y muchas otras
estructuras. Y, todo ello le permitió soportar la embestida que comportaba la reacción electoral de
un pueblo sometido al martirio de esta Guerra Infernal.
Hubiera sido mejor, si:
Hubiésemos profundizado más en la identificación del enemigo principal y EN LOS
PROCESOS QUE NOS APLICA EL ENEMIGO; verbigracia, en la explicación franca, abierta, en
cómo opera la manipulación de la moneda con el DÓLAR TODAY. Soltando datos que
refuercen la observación científica de nuestra estructura económica y de los lazos de la
dependencia que aún existen.
Hubiésemos profundizado más en las virtudes que tiene la GENIAL PROPUESTA DEL
PETRO. Faltó EXPLICAR MÁS EL LEMA, que en mucho se desprende de su levantamiento:
ESPERANZA, DESARROLLO Y PROSPERIDAD.
Hoy, es bueno:
Reforzar lo anterior y darle su debida IMPORTANCIA a la PRODUCCIÓN; pero teniendo como lo
FUNDAMENTAL: ¡ ROMPER EL CERCO FINANCIERO Y FULMINAR LA MANIPULACIÓN DE LA
MONEDA CON EL DÓLAR TODAY, LO CUAL PASA POR IRNOS SACUDIENDO LAS CORPORACIONES
IMPERIALES!
Y, esto se hace activando el Sistema que comporta la propuesta genial que ya tenemos: EL
PETRO.
¡ APUREMOS LOS PROTOCOLOS, ACTIVEMOS AL PUEBLO PARA ENCONTRAR LA VÍA QUE NOS
LLEVE A ALIGERAR NUESTROS PASOS!
¡ CON EL PETRO VENDRÁN LOS PRECIOS JUSTOS Y LA RECUPERACIÓN DEL PODER ADQUISITIVO DE
NUESTRO PUEBLO!